En Estados Unidos, tendemos a avergonzarnos de la idea de declararse en quiebra como medio para escapar de deudas insalvables y hacer borrón y cuenta nueva. Puede existir la noción popular de que basta con trabajar más duro y «tirar de uno mismo» para volver a ponerse en pie. Pero, para mucha gente, el mundo no funciona así. Muchas veces, nuestros intentos de escapar de las deudas sólo acaban creando más deudas. A veces, la única forma de salir del aplastante peso de las deudas es considerar la posibilidad de declararse en quiebra.

Pero la decisión de declararse en quiebra no debe tomarse a la ligera. Considere primero los pros y los contras de una decisión tan importante.

¿Cuáles son las ventajas de la quiebra?

La quiebra no tiene por qué considerarse una posibilidad aterradora. La quiebra tiene muchas ventajas:

  • Es posible que pueda librarse de ciertas deudas insalvables, descartando la necesidad de devolver el dinero de la deuda de la tarjeta de crédito,
  • Su calificación crediticia puede incluso mejorar después de presentar la solicitud.
  • Los acreedores ya no podrán ponerse en contacto con usted por teléfono, correo postal o electrónico, poniendo fin a sus amenazadoras gestiones de cobro.
  • En algunos casos, es posible que no pierda nada de gran valor y pueda conservar su coche, sus bienes inmuebles, pólizas de seguro de vida, pensiones, planes de jubilación y enseres domésticos valorados en hasta 10.000 dólares.
  • Las antiguas obligaciones fiscales pueden desaparecer.
  • Obtenga un nuevo comienzo.

¿Cuáles son los contras de la quiebra?

La decisión de declararse en quiebra no debe tomarse por capricho. La quiebra conlleva ciertos riesgos que deben tenerse debidamente en cuenta.

  • Tu tarjeta de crédito será cancelada, y podría llevar algún tiempo conseguir una nueva tarjeta.
  • La quiebra permanecerá en su informe crediticio durante siete años.
  • Las primas del seguro pueden subir.
  • Podría tener un impacto negativo en las posibilidades de empleo y las opciones de vivienda.
  • Puede ser difícil conseguir una nueva hipoteca en los dos primeros años tras la quiebra.
  • Las deudas de préstamos estudiantiles, las deudas de manutención de los hijos y determinadas deudas fiscales están exentas de la condonación por quiebra.
  • Aunque su casa pueda estar a salvo, podría perder cualquier propiedad inmobiliaria adicional y cualquier posesión de lujo.

¿Cuándo debe hablar con un abogado especializado en quiebras?

Intenta no sentirte derrotado. Nuestro sistema económico es defectuoso y tiende a comerse viva a la gente, por mucho que trabaje. La quiebra puede muy bien ser una opción de último recurso, pero eso no significa que deba verla desde una perspectiva totalmente negativa.

Para saber más sobre si declararse en quiebra es la opción adecuada para usted, es importante hablar con un abogado con experiencia en quiebras y necesidades de planificación patrimonial.